Especial de Santos Cano Luzardo
El pasado 21 de febrero de 2024, el empresario petrolero Ernesto Guevara —oriundo de Anaco, estado Anzoátegui— emitió una denuncia contundente sobre la creciente ola de invasiones de fincas y hatos en varios estados de Venezuela, especialmente en Monagas.
Guevara alertó sobre la presunta participación de particulares que, amparados en supuestos respaldos políticos, estarían ejecutando una ofensiva para apropiarse ilegalmente de tierras productivas. En sus declaraciones, el empresario fue enfático al señalar:
“Particulares válidos de aparente apoyo político siguen intentando apropiarse de fincas y hatos en Monagas y otros estados de Venezuela”.
Uno de los nombres que surgió en sus señalamientos fue el del empresario Samark López, quien estaría involucrado como promotor de estas tomas, según Guevara. Además, mencionó que algunos de los invasores alegarían contar con el respaldo del dirigente oficialista Diosdado Cabello. No obstante, hasta la fecha, no se ha encontrado evidencia que confirme una relación directa entre estas acciones y el liderazgo político mencionado.
El empresario denunció también el uso del sistema judicial como mecanismo de presión contra los legítimos propietarios, bajo argumentos como el supuesto perjuicio a comunidades indígenas, a pequeños productores y la existencia de latifundios.
Guevara subrayó que en Monagas la situación es especialmente crítica para los productores que, como él, han invertido décadas en el desarrollo agropecuario, contribuyendo con la cría de razas bovinas como el brahmán rojo y blanco.
Fuente: Reporte de la Economía
Otros Casos Silenciados
Guevara también señaló otros casos que han pasado desapercibidos para los medios y que, según sus palabras, “han desaparecido como por arte de magia de Google”.
Uno de ellos es el del Fundo Rumania, en el estado Zulia. Marysol Rincón, representante de la familia propietaria del fundo, denunció una campaña de «terrorismo judicial» que amenaza con destruir su legado agroproductivo en el municipio Catatumbo.
Fuente: Portuguesa Reporta
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El Milagro: El Asalto Final a un Ícono del Agro Venezolano
El caso del hato El Milagro, ubicado en Cojedes, representa quizás uno de los episodios más dramáticos. Sobrevivió más de 20 años a intentos de invasión, expropiación, robos y juicios durante los gobiernos chavistas. Sin embargo, recientemente, un grupo armado tomó la propiedad por la fuerza y destruyó sus instalaciones, marcando un punto final para una historia de resistencia agroproductiva.
Fundado en 1959 por Ricardo Zuloaga Pérez-Matos y socios, y administrado desde los años 80 por Gabriel Zuloaga, el hato contaba con 20 mil hectáreas de terreno entre los ríos Chirgua y Pao. Según el testimonio de Gabriel, tras la invasión fueron sustraídos 10 caballos usados en faenas rurales, que posteriormente fueron trasladados al hato San Miguel (antiguo hato Piñero), expropiado en 2005 y hoy en manos de empresarios de origen sirio vinculados a varias propiedades agrícolas y concesiones mineras en la zona.
Cabe destacar que la familia Zuloaga, además de estar ligada al sector agropecuario, mantiene vínculos con el expresidente de Globovisión, Guillermo Zuloaga, y con Jorge Andrés Giménez, presidente de la Federación Venezolana de Fútbol.
El empresario Hadi El Halabi —vinculado al grupo que actualmente administra varios hatos expropiados, entre ellos el antiguo Hato Piñero (hoy Hato San Miguel)— se encuentra actualmente en el centro de múltiples denuncias por delitos graves, que van desde estafas hasta porte ilícito de armas y despojo de tierras.
El pasado mes, El Halabi fue aprehendido en Barinas, según anunció el Fiscal General de la República, Tarek William Saab. El empresario habría engañado a sus víctimas con una estafa de al menos 500.000 dólares en la compra de semovientes, además de portar armamento ilegal.
Los abogados defensores de El Halabi, José Sbat Ghazal y María Eugenia Quintero, adoptaron una actitud «grosera y hostil» frente al tribunal y a los fiscales durante las audiencias, según medios nacionales.
Además, ha llamado la atención la actitud desafiante del propio El Halabi, quien en una entrevista declaró:
“Yo me declaro progobierno”
“36 años después, el futuro ha llegado”
Preguntas Abiertas en el Caso Guevara: ¿Socios, Testaferros o Coincidencias?
En relación con la denuncia inicial del empresario Ernesto Guevara sobre invasiones de tierras, queda un flanco sin aclarar: la relación con la finca Villa Carrara II, ubicada en Los Pozos, parroquia Areo, municipio Cedeño, estado Monagas.
La finca habría pertenecido a Mario D’Ambrosio Rea, C.I. 9.303.025, un conocido empresario ítalo-venezolano y fundador del conglomerado D’Ambrosio, que abarca minería, concreto y construcción en Nueva Esparta. Según informes de inteligencia, en dicha finca se halló una pista de aterrizaje clandestina y más de 15 toneladas de urea, sustancia utilizada como precursor químico en la producción de cocaína.
El operativo fue confirmado por el Mayor General Richard López Vargas, Superintendente Nacional Antidrogas, el 19 de julio, cuando se incautaron también 9 armas de fuego y cuatro equipos de comunicación radial.
[📄 Fuente: La Tabla – Investigación sobre Villa Carrara II]
Esto ha levantado interrogantes aún no respondidas por Guevara:
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¿Es Mario D’Ambrosio su socio o testaferro?
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¿Cuál es el vínculo entre Gustavo Sucre, Samark López y Diosdado Cabello?
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¿Hay nexos entre estas tomas de tierras y las operaciones de narcotráfico encubiertas?
Hasta el momento, no se ha emitido información oficial sobre el avance de la investigación, ni se ha vinculado directamente a D’Ambrosio con actividades delictivas, aunque dos personas fueron detenidas en el procedimiento.
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